Sorry We Missed You (2019)

“Sorry We Missed You” de Michael Winterbottom es una película incómoda, visceral y, a pesar de su lentitud, profundamente resonante. No es un espectáculo de acción ni una comedia ligera; es una disección afilada de la clase media británica en crisis, de las presiones familiares y de la deshumanización que puede derivarse de una búsqueda desesperada por la estabilidad económica.

La película sigue a Ricky, interpretado con una intensidad silenciosa y palpable por Shia LaBeouf, quien ofrece una actuación que va más allá de la simple interpretación. Ricky es un hombre atrapado en una espiral de desilusión y frustración. Su matrimonio con Kay (Rachel Murphy) está en crisis, su hija es constantemente marginada y el constante esfuerzo por mantener una franquicia de entregas a domicilio le roba la humanidad. La película no nos da respuestas fáciles ni nos ofrece un héroe tradicional; nos presenta a un hombre, no un personaje idealizado, que se ve consumido por sus propios esfuerzos.

La dirección de Winterbottom es precisa y claustrofóbica. Se centra en los detalles más pequeños, en los momentos cotidianos que revelan la desesperación subyacente. La fotografía es oscura y apagada, pero no de forma estilizada; refleja el estado emocional de los personajes. La banda sonora, a menudo minimalista y inquietante, acentúa la sensación de incomodidad. No es una película fácil de ver, pero su atmósfera opresiva es esencial para transmitir el mensaje que Winterbottom quiere comunicar.

El guion, coescrito por Winterbottom y James Jobling, es la pieza central de la película. Evita las melodras y se centra en la representación cruda y realista de las relaciones familiares. La dinámica entre Ricky y Kay es particularmente interesante, llena de silencios, miradas rotas y una creciente distancia. La película explora cómo la búsqueda de la independencia económica puede erosionar el amor y la conexión humana. Los personajes secundarios, aunque menos desarrollados, contribuyen a la sensación de un mundo fragmentado y desorientado. La trama, aunque aparentemente sencilla, tiene una sorprendente profundidad, planteando preguntas sobre la moralidad, la culpa y la responsabilidad.

A pesar de su duración y su ritmo pausado, “Sorry We Missed You” es una película que permanece en la mente mucho después de que termina. Es una obra que requiere compromiso por parte del espectador, pero que recompensa con una reflexión honesta y perturbadora sobre la naturaleza humana y las consecuencias de la crisis económica. No es entretenimiento superficial; es una experiencia cinematográfica que provoca y que, en última instancia, nos obliga a confrontar nuestras propias inseguridades.

Nota: 8/10