The Honeymooners (2005)

“The Honeymooners” (2021) no es la comedia que muchos esperaban al ver el anuncio. Llevaba décadas soñando con una adaptación fiel y moderna de la icónica serie de televisión de los años 50, y esta película, dirigida por Peter Cramer, ofrece algo más bien un intento ambicioso y, en última instancia, un poco fallido de revitalizar un material clásico.

La película, protagonizada por Paul Rudd como Ralph Kramden y John Higgins como Ed Norton, se centra en la lucha de un conductor de autobús de Nueva York, Ralph, para llegar a fin de mes. Ralph, un hombre de carácter fuerte y con una visión particular sobre cómo hacer dinero, entra en una serie de elaborados y, francamente, absurdos planes para obtener rápidamente una suma considerable de dinero, siempre con la ayuda (y la inevitable frustración) de su amigo Ed. La premisa no es innovadora, pero la película intenta darle un giro moderno y de comedia negra, y en este aspecto, logrando un cierto nivel de éxito. La dirección, aunque competente, carece de la chispa y el humor contagioso que definieron a la serie original. El ritmo es desigual, con momentos de genuino ingenio interrumpidos por largas secuencias que, aunque visualmente elaboradas, no aportan mucha gracia.

Paul Rudd ofrece una interpretación sólida como Ralph. Captura a la perfección la rabia contenida, la frustración y la exasperación del personaje, aunque, en ocasiones, la exageración es un poco excesiva. John Higgins, en el papel de Ed, aporta un contrapunto cómico importante, dotando al personaje de una vulnerabilidad y una autenticidad que equilibran la personalidad a veces agresiva de Ralph. Sin embargo, el reparto secundario no alcanza el mismo nivel, y algunos personajes, como la esposa de Ralph, Alice, carecen de profundidad y se convierten en meras caricaturas.

El guion es, lamentablemente, el punto más débil de la película. Si bien se esfuerza por modernizar la historia, introduciendo elementos como la situación económica actual y referencias a la cultura pop contemporánea, el resultado es una mezcla confusa de gags y situaciones forzadas que, en lugar de reír a la audiencia, generan cierta incomodidad. La trama principal se desvía constantemente, perdiendo el enfoque y la coherencia. Se intenta jugar con la nostalgia, pero sin aportar una nueva perspectiva o un mensaje que vaya más allá de lo superficial.

En definitiva, “The Honeymooners” (2021) es una película con potencial desperdiciado. Lleva consigo la sombra de una serie legendaria, pero no logra alcanzar su altura, ni siquiera se acerca a la comedia que susprende. Se queda como una sombra, un intento interesante pero no satisfactorio de actualizar una historia que, a pesar de su antigüedad, aún tiene potencial para el humor y la reflexión social.

Nota: 6/10