The House Next Door: Meet the Blacks 2 (2021)

“The House Next Door: Meet the Blacks 2” es, en el mejor de los casos, una experiencia peculiar, y en el peor, un ejercicio de redundancia que intenta, sin mucho éxito, capitalizar la peculiaridad del original. La película, dirigida por David Moreau, se aferra a un concepto que, aunque prometedor en el papel, termina siendo torpe y con una ejecución que, a decir verdad, deja mucho que desear. La premisa, un escritor de novelas de terror que regresa a su hogar y se encuentra con una presencia siniestra y un posible vampiro, sí que tiene potencial para generar suspense y terror psicológico. Sin embargo, la película se pierde en un laberinto de clichés y elementos absurdos que desvirtúan la trama central.

La dirección de Moreau parece incapaz de encontrar un ritmo consistente. Los momentos de tensión se interrumpen con escenas de acción gratuitas y diálogos poco convincentes. Se intenta jugar con el terror atmosférico, pero las estrategias son superficiales y el efecto deseado no se logra. Los flashbacks, elementos utilizados para profundizar en el pasado de los Black, son innecesarios y ralentizan el desarrollo de la historia. La película no logra construir un ambiente de inquietud genuina, sino que se basa en sustos fáciles y efectos especiales que se perciben como forzados. La fotografía, en general, es correcta, pero carece de originalidad y se limita a reproducir tropos visuales típicos del género.

El elenco, liderado por John Travolta y Alan Tudyk, se esfuerza por dar vida a los personajes, aunque las actuaciones no logran compensar las deficiencias del guion. Travolta, en particular, se muestra desmotivado, y su personaje, Carl Black, resulta unidimensional y poco interesante. Tudyk, como el vecino Mr. Harris, ofrece un giro inesperado que, si bien es curioso, termina siendo más un elemento de distracción que de contribución a la trama. Las interacciones entre los personajes son artificiales y carentes de credibilidad. La química entre ellos es prácticamente inexistente, lo que perjudica la capacidad de la audiencia para conectarse emocionalmente con la historia.

En cuanto al guion, es donde la película sufre su mayor problema. La trama se complica innecesariamente, introduciendo nuevos personajes y subtramas que no tienen un impacto significativo en el desarrollo de la historia principal. El origen del ‘vampiro’ se revela de una manera poco satisfactoria, y la resolución del conflicto final es predecible y decepcionante. Se intenta insinuar una crítica social sobre la corrupción y la explotación, pero estas ideas se explican superficialmente y no se integran de manera orgánica en la narrativa. La película parece más preocupada por ofrecer una serie de momentos ‘horrorosos’ que, en última instancia, no tienen un significado más profundo.

En resumen, "The House Next Door: Meet the Blacks 2" es una película olvidable que carece de originalidad y profundidad. Es un intento torpe de revitalizar una franquicia que, en realidad, debería haberse dejado descansar. Es una película que pretende asustar, pero en cambio, resulta más molesta que inquietante.

Nota: 4/10