The Jesus Rolls (2019)

“The Jesus Rolls” es una película que, lejos de la grandilocuencia de las producciones religiosas, ofrece una mirada cruda y a menudo perturbadora a la reinserción social de un ex-prisionero. Dirigida por Andrew Dorfman, la película, en su núcleo, es una exploración del aislamiento, la redención y la dificultad inherente al reencuentro con la sociedad tras un tiempo dedicado a la criminalidad. El resultado es una experiencia cinematográfica inquietante, que busca generar un debate sobre la misericordia y la posibilidad de un cambio verdadero, aunque a menudo con una ejecución que carece de la fluidez y el ritmo que podría haberla elevado a algo más trascendente.

La película se centra en Jesús Quintana (interpretado magistralmente por Tim Robbins), un hombre que regresa a su ciudad natal tras servir su condena. No es un santo, ni siquiera un hombre particularmente simpático, pero la dirección de Dorfman logra evocar una cierta empatía hacia su condición. Robbins ofrece una actuación contenida, pero profundamente expresiva, transmitiendo la desesperación y la vulnerabilidad de un hombre que ha perdido todo y que lucha por encontrar un lugar en un mundo que no le perdona. Su interacción con Petey (Martin Starr) y Marie (Aubrey Plaza), dos personajes igualmente marginales, crea una dinámica compleja y, a menudo, incómoda, donde la amistad se mezcla con la desconfianza y la autodefensa.

El guion, escrito por Dorfman y Justin Henry, es, sin duda, el punto más débil de la película. Si bien la premisa es interesante, la ejecución es irregular y las conversaciones a menudo se sienten artificiales y forzadas. Hay momentos de brillantez, en particular cuando se exploran las reminiscencias de la infancia de Jesús, pero estos fragmentos se diluyen en un flujo de diálogos que, a menudo, son demasiado expositivos. La película se esfuerza por transmitir ideas sobre la culpa, el perdón y la libertad, pero lo hace de forma poco natural, perdiendo en el proceso parte de su impacto emocional. La estética visual, con un blanco inmaculado que contrasta con la oscuridad del pasado de Jesús, es efectiva, pero no alcanza a compensar las deficiencias narrativas.

Sin embargo, la película no es un fracaso absoluto. La atmósfera opresiva y la actuación de Robbins logran mantener el espectador enganchado, aunque a veces con cierta incomodidad. La banda sonora, con sus melodías inquietantes y disonantes, acentúa la sensación de alienación y desolación. "The Jesus Rolls" no busca ofrecer respuestas fáciles ni soluciones definitivas. En cambio, se presenta como una reflexión amarga sobre la dificultad de escapar del pasado y la naturaleza humana, planteando preguntas incómodas sobre la responsabilidad y la redención. Aunque el guion necesita un pulido considerable, la película logra transmitir una sensación de urgencia y desesperación que la diferencia de otras producciones con temáticas similares.

Nota: 6/10