The Sparks Brothers (2021)

“The Sparks Brothers” no es, sin duda, una película para todo el mundo. Es una inmersión profunda, casi claustrofóbica, en la singularidad de una de las bandas más fascinantes y eludidas de la música pop. Para aquellos que ya están enamorados de los hermanos Milius, de su universo obsesivo por el brillo, la ironía y las referencias a la cultura popular, esta cinta de Brent Liston es un tesoro. Para los demás, quizá sea una experiencia desconcertante, pero también, inesperadamente gratificante.

La película se centra en el proceso creativo de los Sparks a lo largo de décadas, utilizando una cantidad asombrosa de material de archivo: entrevistas, actuaciones en directo, sesiones de estudio improvisadas, incluso momentos de sus vidas cotidianas. Liston no busca construir una narrativa lineal, sino más bien tejer una red de conexiones entre sus trabajos, sus influencias y sus obsesiones. Esta ambición puede resultar abrumadora a veces, pero también es lo que le da a la película su auténtico carácter. La dirección es inteligente y precisa, permitiendo que la banda, y sobre todo sus personalidades complejas, brille. Liston se convierte en un observador silencioso, que documenta la evolución de sus ideas, su humor peculiar y, en ocasiones, sus frustraciones. Hay un ritmo deliberadamente lento, que recompensa la paciencia del espectador.

El guion, o más bien, la ausencia de un guion convencional, es un elemento clave. Es un ejercicio en la construcción de un documental donde la espontaneidad y la improvisación son la norma. Las entrevistas son crujientes y honestas, revelando la dinámica fraternal, sus rivalidades y sus profundas conexiones musicales. Russell y Ron Milius, a pesar de sus diferencias evidentes, comparten una visión artística innegable y un amor por la precisión y el detalle. Las actuaciones grabadas, desde las primeras guitarras eléctricas hasta los elaborados espectáculos visuales de los últimos años, son un testimonio de su increíble dedicación y su habilidad para crear mundos propios. La banda es un espectáculo en sí misma, y la película lo captura con una fidelidad impresionante.

Es importante recalcar que "The Sparks Brothers" no es un documental que busca glorificar a la banda. Es un análisis honesto y crítico de su trayectoria, que reconoce sus éxitos, pero también sus fracasos y sus momentos de mediocridad. La película no intenta simplificar la complejidad de la obra de los Sparks, sino que la invita a ser explorada en profundidad. Si buscas una película fácil de digerir, con una banda sonora pulida y una narración convencional, esta no es para ti. Pero si estás dispuesto a sumergirte en el universo de una de las bandas más originales e influyentes de la historia de la música, “The Sparks Brothers” es una experiencia que no te dejará indiferente. Es un regalo para los fans, y una oportunidad para descubrir a los Sparks a aquellos que aún no los conocen.

Nota: 8/10