Torrente 3: El protector (2005)

“Torrente 3: El Protector” es una explosión de absurdo y acción que, al igual que sus predecesoras, se presenta como una comedia de acción descarada y sin complejos. La película, dirigida nuevamente por Santiago Segura, se distancia considerablemente de cualquier pretensión narrativa seria, optando por un caos controlado y una sensación general de “qué estoy viendo aquí?” que, para algunos, es precisamente lo que la hace tan atractiva.

La trama, aunque aparentemente simple –una eurodiputada investigando la contaminación de una multinacional y un agente del orden al que se le asigna Torrente– sirve como excusa para desplegar un torbellino de situaciones cómicas y violencia exagerada. La llegada de Giannina Ricci (interpretada con naturalidad y dignidad por Alexandra Mas), una figura inteligente y decidida, proporciona un contrapunto interesante al carácter excéntrico y profesionalmente incompetente de Torrente (Sergio Ramos). La tensión entre ambos, producto de sus personalidades opuestas, genera algunos de los momentos más divertidos del filme. Si bien el arco argumental de la eurodiputada es lo más débil de la película, se utiliza de manera efectiva para justificar las estridencias que la componen.

Sin embargo, la verdadera fuerza de "Torrente 3" reside en su capacidad para mantener un tono absurdo constante. La película no se toma en serio sus propias locuras, saboreando cada giro inesperado y cada escena de acción excesivamente coreografiada. Ramos, como Torrente, ofrece una interpretación física y expresiva que es, en sí misma, una comedia. Sus gestos, su mirada, sus comentarios sin sentido, todo contribuye a la atmósfera general de caos controlado.

La dirección de Santiago Segura es, como siempre, audaz y desinhibida. Las escenas de acción, aunque a veces exageradas hasta la ridiculez, están filmadas con una energía palpable y un montaje frenético que mantienen la atención del espectador. El uso del color y la música, aunque no siempre innovador, refuerza el ambiente de locura y desenfreno. No obstante, es innegable que el guion, aunque entretenido, carece de profundidad y repite patrones temáticos de las entregas anteriores. La resolución, en particular, resulta un poco apresurada y, de nuevo, basada en la suerte y el golpe de suerte.

En definitiva, "Torrente 3: El Protector" es una película que no pretende ser más de lo que es: una comedia de acción repleta de situaciones surrealistas, personajes extravagantes y un ritmo frenético. Si buscas una experiencia cinematográfica que te haga reír a carcajadas y te deje sin palabras, esta película cumple con creces su cometido. Pero si esperas una trama sólida o personajes desarrollados, probablemente te decepciones. Es una película para disfrutarla con los amigos, una noche de risas y con la mente abierta al caos.

Nota: 6/10