Trippin' (1999)

“Trippin’” es una comedia adolescente que, a pesar de no romper esquemas, logra resultar entretenida y, en ocasiones, sorprendentemente perspicaz. La película, dirigida por Brian Presley, se centra en Greg, un joven estudiante de secundaria que vive en un torbellino de sueños, ilusiones y, como su nombre indica, ‘trippin’ – es decir, desvaríos y pensamientos aleatorios que lo alejan de la realidad. La película no se enfrenta a la grandilocuencia ni a las grandes narrativas; se concentra en el microcosmos de las aspiraciones, las frustraciones y la inexperiencia del protagonista, lo cual la convierte en una observación realista, aunque con un ligero toque de humor.

La dirección de Presley es simple pero efectiva. Se centra en el personaje de Greg, permitiéndonos empatizar con sus miedos y sus anhelos. El ritmo es pausado, con momentos de intensidad genuina que contrastan con las situaciones cómicas. La banda sonora, que incluye diversas influencias indie y pop, refuerza la atmósfera juvenil y contribuye al tono general de la película. Sin embargo, a veces, la narrativa se siente un tanto estática, sin un desarrollo argumental particularmente complejo. No se trata de una obra maestra cinematográfica, pero sí de una comedia ligera y agradable que cumple su cometido.

El actor que interpreta a Greg, Brett DaViere, ofrece una interpretación convincente. Transmite la inseguridad y la vulnerabilidad del personaje con naturalidad. Su mirada, a menudo llena de incertidumbre, es el centro de la película. La química con Cinny (played by Maya Wilson) es creíble, aunque el romance, como es habitual en este género, se desarrolla de una manera algo simplificada. Sin embargo, la relación se presenta como un reflejo de la propia inmadurez de Greg. Los personajes secundarios, incluyendo a Mr. Shapic (interpretado con matices por Joe Estevez), añaden profundidad a la historia, aportando un toque de sabiduría y a veces, un contrapunto divertido a la desesperación de Greg.

El guion, aunque no destaca por su originalidad, logra capturar la esencia de la adolescencia: la búsqueda de la identidad, el miedo al fracaso y la dificultad de conectar con los demás. Las conversaciones entre los personajes, a menudo llenas de metáforas y reflexiones sobre la vida, son un punto fuerte de la película. Se vislumbra en las escenas de introspección de Greg su lucha por alejarse de los sueños idealizados y enfrentar la realidad con honestidad. El tema de la presión familiar y la búsqueda de un rumbo en la vida son abordados de una forma sutil y, en definitiva, relevante. A pesar de las complicaciones que plantea la situación, la película le da a Greg la oportunidad de redescubrirse a sí mismo.

Nota:** 6/10