Un Diamante Al Rojo Vivo (1972)

“Un Diamante Al Rojo Vivo” (Uncut Diamond) es una comedia de acción mordaz que, aunque no alcanza la perfección de algunas de sus predecesoras en el género de la pequeña infiltración, ofrece un entretenimiento sólido y un fresco enfoque sobre la codicia humana y la corrupción. La película, dirigida por Christopher Bailey, no se aferra a clichés predecibles; en cambio, presenta una historia con cierta profundidad y, lo que es más importante, con personajes que se sienten sorprendentemente reales, incluso en sus actos más absurdos.

La dirección de Bailey es notablemente práctica. No se le da demasiada importancia a la espectacularidad visual, privilegiando un estilo cinematográfico más realista y cercano a la observación, como si el espectador fuera un testigo silencioso de un plan que se tambalea constantemente. Se concentra en los detalles: la tensión palpable en el ambiente del museo, el sudor en las frentes de los ladrones, la atmósfera claustrofóbica del plan. Esta elección estilística ayuda a que la comedia tenga un impacto mayor y refuerza la sensación de autenticidad, incluso cuando se trata de un atraco. La coreografía de las escenas de acción es inteligente y divertida, evitando el exceso de artificios y priorizando el ingenio sobre la violencia.

El elenco principal está a un nivel muy alto. Ray Liotta, en el papel de John Dortmunder, ofrece una interpretación convincente como un criminal endurecido por la prisión pero aún con un brillo de astucia y desesperación. Su evolución a lo largo de la película es gradual y creíble. El veterano Stephen Gray играет el papel de Allan con una gracia y un humor sutiles, aportando un matiz inesperado al personaje, un viejo amigo con un pasado turbio y una lealtad inquebrantable (aunque cuestionable). La química entre Liotta y Gray es excelente, alimentando la dinámica de la película y sus constantes desincronizaciones. La joven actriz que interpreta a la hija de Dortmunder, aporta una vitalidad refrescante a la narrativa.

El guion, adaptado de la novela de Donald Bain, es lo que realmente eleva la película. La historia no se basa únicamente en la acción; explora con inteligencia la motivación de los personajes, sus debilidades y las consecuencias de sus acciones. La comedia surge de la interacción entre los personajes y de las situaciones imprevistas que surgen en el transcurso del plan. Se juega con la idea de la suerte y la mala fortuna, mostrando cómo incluso los planes más elaborados pueden ser arruinados por un simple error. Además, la película no escatima en sarcasmo con respecto a la obsesión por la riqueza y el materialismo.

No obstante, la película no está exenta de algunas fallas menores. Algunos diálogos podrían ser más ágeles, y el ritmo en el segundo acto podría haberse aprovechado mejor. Sin embargo, estas son imperfecciones menores que no restan valor a una comedia de acción inteligente, entretenida y con un toque de humor negro muy bien ejecutado. “Un Diamante Al Rojo Vivo” es, en definitiva, una joya que merece la pena ser descubierta.

Nota: 7/10