Un trabajo embarazoso (2009)

“Un trabajo embarazoso” (Sliding Doors) de Peter Bartrosky no es precisamente una obra maestra cinematográfica, pero sí una comedia ligera y entretenida que, contra todo pronóstico, logra crear cierta conexión con el espectador. Lindsay Lohan, en un papel que le permite mostrar cierta versatilidad, encarna a Thea, una joven secretaria que, impulsada por la desesperación, recurre a un engaño que rápidamente se sale de control. La premisa central, una joven fingiendo embarazo para evitar el despido, es digna de un thriller psicológico, pero el director la maneja con una ligereza que la convierte en una comedia que busca el risa fácil y, en gran medida, lo consigue.

La dirección de Bartrosky es funcional, sin ser particularmente innovadora. Se centra en el desarrollo de la situación y en la interacción de Thea con el resto del personal de la editorial. No se complica demasiado con temas filosóficos o reflexiones profundas, lo cual no es un problema en este tipo de película. Lo que sí funciona bien es el ritmo, que se mantiene constante y mantiene el interés del espectador. La película evita caer en la pedantería y se permite disfrutar del humor que ofrece la situación. Sin embargo, la atmósfera general es un poco plana, carente de un "punch" emocional que profundice en el dilema moral de Thea.

La actuación de Lohan es sólida. Ella transmite la vulnerabilidad y el miedo de Thea con naturalidad, mostrando un descenso progresivo de la desesperación a la satisfacción con su propio éxito. El resto del elenco secundario, compuesto por rostros conocidos como Denis Leary, también contribuye con personajes caricaturescos y divertidos, aunque sus interpretaciones son, en general, predecibles. La química entre Lohan y Denis Leary, en particular, añade un toque de humor a la trama.

El guion, escrito por Bartrosky y David Rosenbaum, es, en su mayoría, correcto. Se basa en situaciones cómicas que surgen de la reacción exagerada del entorno de Thea al descubrir su engaño. Se incluyen algunos momentos genuinamente graciosos, pero también hay algunas escenas que podrían haber sido más elaboradas y que se quedan en un nivel superficial. El giro argumental, que revela la verdadera motivación de Thea, es satisfactorio y añade una capa de complejidad a la trama. No obstante, la película se evita confrontar de manera explícita las implicaciones éticas de su conducta.

En definitiva, “Un trabajo embarazoso” es una comedia ligera y accesible, ideal para una noche de cine relajada. No es una película que dejará una huella imborrable, pero cumple su cometido: entretener y hacer reír. Si buscas una opción entretenida y sin complicaciones, esta podría ser una buena elección.

Nota: 6.5/10