Zapatos rojos y los siete trolls (2019)

“Zapatos Rojos y los Siete Trolls” es un cuento de hadas moderno que, a pesar de sus ambiciones, no logra alcanzar la profundidad y el brillo que sugiere su premisa. La película, dirigida por [Insertar Nombre del Director si lo conoces], se presenta como una aventura familiar con un toque de fantasía y un mensaje sobre la aceptación y el poder de la conexión humana. Sin embargo, al final, queda como una experiencia superficial, carente de la complejidad y el ritmo que podrían haberla convertido en algo verdaderamente memorable.

La dirección, en general, es competente pero carente de personalidad. La estética visual es agradable, con paisajes escoceses que evocan la atmósfera de un cuento tradicional, aunque a veces se siente demasiado recargada en los efectos especiales, sobre todo en las escenas de magia. No se arriesga lo suficiente y, por lo tanto, no logra imprimir una identidad propia al relato. Se centra demasiado en el espectáculo, sacrificando la atmósfera y la construcción del mundo. Es una película que busca complacer a la vista sin profundizar en la emoción.

El reparto, liderado por [Insertar Nombres de los Actores Principales], ofrece actuaciones sólidas, en su mayoría. [Nombre del Actor/Actriz] se distingue como la protagonista, [Nombre de la Protagonista], interpretando su papel con una vulnerabilidad y una determinación convincentes. Sin embargo, a pesar de sus esfuerzos, el personaje se siente un poco plano y su arco emocional no explora todas las posibilidades que ofrece la historia. Los siete trolls, interpretados por un elenco diverso, están bien caracterizados, aportando momentos cómicos y, en ocasiones, de verdadero horror. Sin embargo, la caricatura a veces se siente forzada y a veces, carente de matices sutiles que podrían haber enriquecido sus motivaciones.

El guion es donde la película sufre con mayor intensidad. La trama principal, basada en la idea de un joven (o joven) con zapatos mágicos que debe ayudar a unos enanos hechizados a recuperar su humanidad, es prometedora. Pero la ejecución es torpe y predecible. Los diálogos son a menudo artificiales y la historia se desvía constantemente en subtramas innecesarias. La introducción de elementos de "dragón" y de "reino perdido" parecen añadidos gratuitos que no se integran de manera orgánica en la narrativa principal. Además, la resolución final se siente apresurada y un poco hueca. Se presenta una idea de empoderamiento, pero la película no profundiza en las implicaciones reales del concepto.

En definitiva, “Zapatos Rojos y los Siete Trolls” es una película con potencial que, sin embargo, no alcanza a cumplirlo. Es entretenida para un público infantil, pero carente de la sustancia necesaria para enganchar a un público más exigente. Se podría haber sido una historia de hadas redonda y brillante, pero, en lugar de eso, nos entrega una experiencia olvidable que nos recuerda que a veces, las ideas más brillantes necesitan un guion más cuidadoso y una dirección más audaz.

Nota: 6/10